martes, 7 de junio de 2016

Cantos Piadosos. El Fornicio. Gonzalo Rojas




Te besara en la punta de las pestañas y en los pezones, te turbulentamente besara,
mi vergonzosa, en esos muslos
de individua blanca, tocara esos pies
para otro vuelo más aire que ese aire
felino de tu fragancia, te dijera española
mía, francesa mía, inglesa, ragazza,
nórdica boreal, espuma
de la diáspora del Génesis, ¿qué más
te dijera por dentro?
                                ¿griega,
mi egipcia, romana
por el mármol?
                        ¿fenicia,
cartaginesa, o loca, locamente andaluza
en el arco de morir
con todos los pétalos abiertos,
                                               tensa
la cítara de Dios, en la danza
del fornicio?
Te oyera aullar,
te fuera mordiendo hasta las últimas
amapolas, mi posesa, te todavía
enloqueciera allí, en el frescor
ciego, te nadara
en la inmensidad
insaciable de la lascivia,
                                     riera
frenético el frenesí con tus dientes, me
arrebatara el opio de tu piel hasta lo ebúrneo
de otra pureza, oyera cantar a las esferas
estallantes como Pitágoras,
                                           te lamiera,
te olfateara como el león
a su leona,
                 parara el sol,
fálicamente mía,
                         ¡te amara!

De Oscuro, 1977.

miércoles, 1 de junio de 2016

Entrevista con Alonso de Molina


Conversando con Liss   
Por: Lissette Ambrosio Rivas
 Miembro del Consejo Editorial de
'Creatividad Internacional'
 
 
ALONSO DE MOLINA
 No busco el verso ni el poema, creo que el poema sale a mi encuentro, la ha tomado conmigo y me busca
 
 
¿Qué lo impulsa a escribir?
En realidad no sé muy bien qué me impulsa a escribir,  pero pudiera ser que escribo para crear un espacio particular, íntimo y propio donde encontrar respuestas sobre mí mismo en particular y sobre el ser humano en general en una sociedad que hemos creado entre todos y en la que cada vez nos invade una enorme  y compleja paradoja, se comparte más, estamos más cerca unos de otros, mejor comunicados pero se habla menos, se dialoga menos; en la poesía he encontrado un excelente medio de expresión, un hondo pozo de conocimiento donde te obligas a una búsqueda constante en pos de entender la vida; siendo impulsivo, algo osado me gusta observar y experimentar con todo lo que a mi alrededor acontece, soy consciente que es preciso equivocarse para poder acertar, que es necesario conocer lo oscuro para valorar la luz.
No soporto la hipocresía ni las verdades a medias, me gusta ir directo, a bocajarro, en pos de la verdad, no se estar callado, digo lo que pienso y muchas veces no pienso lo que digo. En el fondo, la poesía no sirve para nada pero invita a la reflexión, mata algo la soledad y a veces incluso divierte.
 
 
¿Cuáles han sido  sus lecturas preferidas
Puro autodidacta. No tengo un currículum académico. Soy, tal vez, de los que han vivido, y vivo, a salto de mata; mi educación más que precaria es nula, así y todo, llevado por algún atávico instinto, procuro apartarme de la mediocridad, de ese asfalto hirviente que te quema los pies y te hace tragar saliva mientras apartas la vista de lo mezquino y vulgar. Acaso hubiera deseado  tener estudios sobre letras y filosofía de la vida, pues a pesar del tiempo que ha transcurrido desde que nací y los kilómetros que he recorrido, me siento a veces náufrago incapaz de entender a las personas y comprender lo que ocurre en el mundo. Tampoco, culturalmente, es que haya vivido debajo de un puente, no soy del todo un menesteroso cultural, pues de niño leía a El Capitán Trueno, el TBO y me desternillaba con Mortadelo y Rompetechos mientras leía el Tío Vivo.
De muchacho me sonreía con Mafalda, me encandilaban los versos de Lorca, Miguel Hernández, Machado... y me alborotaron poetas como Leonard Cohen, Jaime Sabines  o Carlos Edmundo de Ory. Después fueron llegando Neruda, Pablo De Rokha, Vicente Huidobro, Walt Whitman, Baudelaire, Cortázar, Paul Éluard, Borges….
De joven tambien me gustaba leer el Tao Te King de Lao Tsé y los aforismos de Nietzsche; leía los Yoga Sutras de Patanjali y por mi enorme afición a las artes marciales leía con devoción al maestro zen Taisen Deshimaru. Y algo me debe de quedar de este apego oriental, pues en los útimos años vengo leyendo a autores japoneses como Haruki Murakami, que espero que por fin le den el Nobel de Literatura porque lo merece, como ya ocurriera con su compatriota Yasunari Kawabata que ha sido hasta ahora el único japonés galardonado con el Nobel de literatura.
 
 
 
 
¿Piensa que ha tenido alguna influencia o cuáles?
Me declaro omnívoro. Y como a Borges, no me interesan los multitudes, escribo para mi propia vanidad, para resguardarme del soliloquio que prevalece en mí y escribo también para los desatinados que opten por leerme; prefiero individualidades, personas con cara y nombre propio y también coincido con Borges en que solo leo lo que me engancha desde el primer momento, si una lectura me aburre cierro el libro.
-Influencias? Soy influenciable, pero no suelo adoptar ningún tipo de influencia. Soy omnívoro -ya digo- y picoteo de todos los platos que atrapan mi interés. No busco el verso ni el poema, creo que el poema sale a mi encuentro, la ha tomado conmigo y me busca, a veces frontal o verticalmente, otras al trasluz, pero me busca como el que busca un día de lluvia en el desierto o un vientre contorsionista con suficiente cintura como para esquivar las trampas de la cotidiana realidad. 
 
 
¿Cuáles han sido sus motivaciones más recientes para escribir?
En los últimos meses estoy recopilando escritos míos que datan desde los inicios de los foros poéticos en Internet, desde el año 2000 concretamente. Observo que hay muchísimo material y que justamente por no poseer una educación literaria mi forma de escribir es bastante distinta a muchísimos otros, eso me hace sentir diferente y me anima a emprender proyectos que estaban relegados, puesto que pasados los cuarenta, literariamente Inédito, me sentí claramente aludido, ya no sería nada en la literatura, mis textos quedarían relegados a poquísimos lectores, probablemente a ninguno, a lo más podrían permanecer virtualizados en algún blog, confinado a la indiferencia de millones de caracteres en código binario que nutren la maraña de Internet.
Así que lejos del desánimo estoy preparando una extensa bibliografía de trabajos inéditos -unos 18 libros de poesía que se distribuirán próximamente en digital- además de estar inmerso en dos trabajos literarios –una novela y un libro de poemas con algunas variables inéditas- que espero que este 2016 vean la luz y puedan ser distribuidos en España y Latinoamérica.
 
 
¿Su rutina diaria tiene alguna relación con sus hábitos poéticos?
Tengo mi propia empresa. En la vida diaria, me desenvuelvo como gestor de proyectos, project manager como se dice ahora, intento coordinar más que liderar, cohesionar planteamientos e ideas y emerger siempre, constantemente startup.
 
 
¿En estos momento, cuáles son los libros que sientes más cerca de ti?
Me gusta la literatura japonesa, me gustan los manuales sobre yoga y cultura oriental, poesía debería leer más, apenas si leo lo que yo mismo escribo, una vez descargado me olvido, como reza el Tao Te King, acabada la obra y el mérito cumplido, lo oportuno es retirarse.
Aprovecho para saludar a todos los amigos, compañeros y compañeras que tengo en Creatividad Internacional y agradecerte, Ismael, tu buen talante, así como la buena acogida que siempre me has dispensado.
 
 

http://www.creatividadinternacional.com/group/conversando-con-liss-casa-azul-ediciones/forum/topics/entrevista-con-alonso-de-molina#comments

domingo, 8 de mayo de 2016

Más allá de la poesía, la metapoesía implica al público





La poesía, como el mar de Benedetti, no se avergüenza de sus náufragos. La poesía es una inquietud constante, también, como el mar, capaz de arrastrarte a territorios suicidas y además, la poesía, araña con las uñas el fondo de cualquier cuenco, escarba en la memoria para que nada muera, y te ofrece las llaves para que todo sea un preciado caudal que nos desborde y nos inunde de palabras, sonidos, sensaciones,… sin más limite que el poder creacionista de cada autor. La poesía es una exigencia continua, una revolución constante donde la creación de cada autor es un conjunto independiente y único que no necesita más explicación que la emoción que pueda llegar a generar.

La creación poética no tiene porqué imitar la realidad ni describir ni explicar nada, se explica por sí sola, o no se explica. En poesía, el poema es el puntal de la obra del poeta. Pero más allá de la poesía, la metapoesía implica al público y solicita del narrador elementos como la expresión corporal, miradas, sonidos, muecas,... en un espacio escénico predispuesto para tal fin, para que pueda provocar en el espectador sensaciones que lo hagan ser partícipes y no meros espectadores de la obra en cuestión.

jueves, 28 de abril de 2016

“Gotas de luz viva”. Carmen Albertus



“Gotas de luz viva” es el libro de poemas de Carmen Albertus que estoy leyendo de los cuatro que han llegado a mis manos con dedicatoria incluida.
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Conozco a Carmen Albertus desde hace ya bastantes años, más de 15. Coincidimos además en el “Encuentro de Poetas de los Tres Mares. Valencia 2006” y la recuerdo como una persona comprometida con la poesía, afable y abiertamente generosa.
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Tal vez porque la conozca, me sea sencillo, además de agradable, comentar un poema, un libro de poema de Carmen Albertus, pues la poeta se maneja bien tanto en verso libre como en estructurado como el soneto, pero es, a mi modo de ver, en verso libre donde Carmen  combina magistralmente innumerables recursos expresivos para recrear en el lector las más diversas emociones:
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“Todo se conjuga cuando la tempestad se abre / frente al acantilado, allí el diablo nos tienta, / la muerte se disfraza de beso y el destino se cumple.”
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“Poesía es una expresión artística a través de la palabra ya sea en verso o prosa y realizada de forma que nos hace amarla y nos produce un deleite espiritual”. Bien cierto es que el arte es captado de diferente manera por cada persona, pero esto es lo que dice la Real Academia Española y lo matiza el prologuista de “Gotas de luz viva”, Jerónimo Muñoz, exteriorizando esta definición de poesía tras mezclar muy  acertadamente las definiciones de “poesía” y “belleza” que hace la RAE.
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La poesía de Carmen Albertus es una poesía donde la naturaleza, el amor y la rotundidad de la vida abren sus ventanas para acariciar y gritar retumbando como un eco, poesía de la experiencia, tal vez, pero siempre poesía de compromiso con la realidad de la vida y la existencia humana.
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Gracias Carmen por el regalo de tu poesía!.

martes, 12 de abril de 2016

Alonso de Molina entrevistado por Lissette Ambrosio Rivas



Conversando con Liss   
Por: Lissette Ambrosio Rivas
 Miembro del Consejo Editorial de
'Creatividad Internacional'
ALONSO DE MOLINA


 No busco el verso ni el poema, creo que el poema sale a mi encuentro, la ha tomado conmigo y me busca



¿Qué lo impulsa a escribir?
En realidad no sé muy bien qué me impulsa a escribir,  pero pudiera ser que escribo para crear un espacio particular, íntimo y propio donde encontrar respuestas sobre mí mismo en particular y sobre el ser humano en general en una sociedad que hemos creado entre todos y en la que cada vez nos invade una enorme  y compleja paradoja, se comparte más, estamos más cerca unos de otros, mejor comunicados pero se habla menos, se dialoga menos; en la poesía he encontrado un excelente medio de expresión, un hondo pozo de conocimiento donde te obligas a una búsqueda constante en pos de entender la vida; siendo impulsivo, algo osado me gusta observar y experimentar con todo lo que a mi alrededor acontece, soy consciente que es preciso equivocarse para poder acertar, que es necesario conocer lo oscuro para valorar la luz.
No soporto la hipocresía ni las verdades a medias, me gusta ir directo, a bocajarro, en pos de la verdad, no se estar callado, digo lo que pienso y muchas veces no pienso lo que digo. En el fondo, la poesía no sirve para nada pero invita a la reflexión, mata algo la soledad y a veces incluso divierte.
¿Cuáles han sido  sus lecturas preferidas
Puro autodidacta. No tengo un currículum académico. Soy, tal vez, de los que han vivido, y vivo, a salto de mata; mi educación más que precaria es nula, así y todo, llevado por algún atávico instinto, procuro apartarme de la mediocridad, de ese asfalto hirviente que te quema los pies y te hace tragar saliva mientras apartas la vista de lo mezquino y vulgar. Acaso hubiera deseado  tener estudios sobre letras y filosofía de la vida, pues a pesar del tiempo que ha transcurrido desde que nací y los kilómetros que he recorrido, me siento a veces náufrago incapaz de entender a las personas y comprender lo que ocurre en el mundo. Tampoco, culturalmente, es que haya vivido debajo de un puente, no soy del todo un menesteroso cultural, pues de niño leía a El Capitán Trueno, el TBO y me desternillaba con Mortadelo y Rompetechos mientras leía el Tío Vivo.
De muchacho me sonreía con Mafalda, me encandilaban los versos de Lorca, Miguel Hernández, Machado... y me alborotaron poetas como Leonard Cohen, Jaime Sabines  o Carlos Edmundo de Ory. Después fueron llegando Neruda, Pablo De Rokha, Vicente Huidobro, Walt Whitman, Baudelaire, Cortázar, Paul Éluard, Borges….
De joven tambien me gustaba leer el Tao Te King de Lao Tsé y los aforismos de Nietzsche; leía los Yoga Sutras de Patanjali y por mi enorme afición a las artes marciales leía con devoción al maestro zen Taisen Deshimaru. Y algo me debe de quedar de este apego oriental, pues en los útimos años vengo leyendo a autores japoneses como Haruki Murakami, que espero que por fin le den el Nobel de Literatura porque lo merece, como ya ocurriera con su compatriota Yasunari Kawabata que ha sido hasta ahora el único japonés galardonado con el Nobel de literatura.

¿Piensa que ha tenido alguna influencia o cuáles?
Me declaro omnívoro. Y como a Borges, no me interesan los multitudes, escribo para mi propia vanidad, para resguardarme del soliloquio que prevalece en mí y escribo también para los desatinados que opten por leerme; prefiero individualidades, personas con cara y nombre propio y también coincido con Borges en que solo leo lo que me engancha desde el primer momento, si una lectura me aburre cierro el libro.
-Influencias? Soy influenciable, pero no suelo adoptar ningún tipo de influencia. Soy omnívoro -ya digo- y picoteo de todos los platos que atrapan mi interés. No busco el verso ni el poema, creo que el poema sale a mi encuentro, la ha tomado conmigo y me busca, a veces frontal o verticalmente, otras al trasluz, pero me busca como el que busca un día de lluvia en el desierto o un vientre contorsionista con suficiente cintura como para esquivar las trampas de la cotidiana realidad. 
¿Cuáles han sido sus motivaciones más recientes para escribir?
En los últimos meses estoy recopilando escritos míos que datan desde los inicios de los foros poéticos en Internet, desde el año 2000 concretamente. Observo que hay muchísimo material y que justamente por no poseer una educación literaria mi forma de escribir es bastante distinta a muchísimos otros, eso me hace sentir diferente y me anima a emprender proyectos que estaban relegados, puesto que pasados los cuarenta, literariamente Inédito, me sentí claramente aludido, ya no sería nada en la literatura, mis textos quedarían relegados a poquísimos lectores, probablemente a ninguno, a lo más podrían permanecer virtualizados en algún blog, confinado a la indiferencia de millones de caracteres en código binario que nutren la maraña de Internet.
Así que lejos del desánimo estoy preparando una extensa bibliografía de trabajos inéditos -unos 18 libros de poesía que se distribuirán próximamente en digital- además de estar inmerso en dos trabajos literarios –una novela y un libro de poemas con algunas variables inéditas- que espero que este 2016 vean la luz y puedan ser distribuidos en España y Latinoamérica.
¿Su rutina diaria tiene alguna relación con sus hábitos poéticos?
Tengo mi propia empresa. En la vida diaria, me desenvuelvo como gestor de proyectos, project manager como se dice ahora, intento coordinar más que liderar, cohesionar planteamientos e ideas y emerger siempre, constantemente startup.
¿En estos momento, cuáles son los libros que sientes más cerca de ti?
Me gusta la literatura japonesa, me gustan los manuales sobre yoga y cultura oriental, poesía debería leer más, apenas si leo lo que yo mismo escribo, una vez descargado me olvido, como reza el Tao Te King, acabada la obra y el mérito cumplido, lo oportuno es retirarse.
Aprovecho para saludar a todos los amigos, compañeros y compañeras que tengo en Creatividad Internacional y agradecerte, Ismael, tu buen talante, así como la buena acogida que siempre me has dispensado.

sábado, 9 de abril de 2016

El amor del diablo. Reseña








-1-2-3-
En la novela "El amor del diablo" de Andrés Rubia Pedreño, tercera de su bibliografía, van sucediéndose personajes, acontecimientos, situaciones y circunstancias diversas que entretejen una trama en un marco que discurre de forma paralela entre la ficción y la realidad.
Andrés Rubia, en esta novela, aplica el concepto de ficción histórica, mediante la recreación de sucesos reales -como tema recurrente- con el propósito único del entretenimient...o. Propósito que consigue, además, de forma estética y amena en cuanto que logra, con esta narrativa, ofrecernos distintas recreaciones de acontecimientos históricos a través de los personajes de ficción creados por el mismo.
En las distintas imágenes literarias que podemos ir observando en esta obra, se narran hechos o acontecimientos que pueden o no ser verídicos al cien por cien: –por un lado hechos creíbles- mediante un discurso narrativo costumbrista de finales del Siglo XV. -Y por otro lado hechos inverosímiles- por cuanto el autor traslada a algunos de sus personajes principales a la época actual, seis siglos después.


El autor ha hecho una novela apta para todo tipo de lectores, pero de manera especial para aquellos que disfrutan de una lectura con un enfoque narrativo versátil, lleno de ocurrencias, incidentes, en suma peripecias del más variado calado, y que les provoque cuando menos, la expectación y la emoción.

En 1483, un joven y noble caballero, llamado Damiano Ciclidino, es exiliado por no dejarse ganar en una interminable partida de ajedrez con el v...anidoso marqués de Biarritz.
Damiano Ciclidino, se ve obligado a abandonar las esplendidas costas de Biarritz, en el suroeste de Francia, para emprender una aventura en solitario. Un inestable -venturoso- nomadismo que lo lleva a la Región de Aveyron, concretamente a Najac, en los lindes de los montes Aubrac, en el Valle de Lot, a unos 300 km de la frontera pirenaica con España, esplendida –por cierto- región ganadera, de apacibles paisajes, inspiradores de paz y armonía, pero no exentos de peligros, hechicerías, magia y, tal vez, pactos con el diablo.




El exiliado Damiano Ciclidino es el personaje central de la novela y, en el devenir de esta historia, va sobrellevando distintos fenómenos de índole paranormal que le obligan a actuar de maneras diametralmente antagónicas.

No se siente en ningún momento desamparado, el apuesto Ciclidino, pues en Aveyron logrará hospicio. Allí será admitido, siendo además muy bien considerado, hasta el punto que el amo y señor del lugar, le nombra batlle –lo que quiere decir- regidor del feudo, y como huésped especial, le ofrece el confortable palacete de Najac, lugar donde convergerán extraños y comprometidos sucesos, los cuales, conducirán a Damiano a desenvolverse con suma pulcritud junto a su admirada Stela, una de las tres sirvientas, por el aparente y azaroso parecido de sus ojos con los de la Duquesa Andrea Di Prada, nada menos que la esposa de su benefactor, el singular y carismático Grohan, poderoso duque de la Región de Rodez, un personaje déspota y cruel, pero enfermo de amor por su bella y hermética esposa, la inaccesible Andrea Di Prada.


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Gracias por echar un vistazo y dejar un comentario
en estos sitios donde puedes ver algunos de mis trabajos.


Google Books
Amazon Books

El amor del diablo. Reseña



 


-1-2-3-
En la novela "El amor del diablo" de Andrés Rubia Pedreño, tercera de su bibliografía, van sucediéndose personajes, acontecimientos, situaciones y circunstancias diversas que entretejen una trama en un marco que discurre de forma paralela entre la ficción y la realidad.
Andrés Rubia, en esta novela, aplica el concepto de ficción histórica, mediante la recreación de sucesos reales -como tema recurrente- con el propósito único del entretenimient...o. Propósito que consigue, además, de forma estética y amena en cuanto que logra, con esta narrativa, ofrecernos distintas recreaciones de acontecimientos históricos a través de los personajes de ficción creados por el mismo.
En las distintas imágenes literarias que podemos ir observando en esta obra, se narran hechos o acontecimientos que pueden o no ser verídicos al cien por cien: –por un lado hechos creíbles- mediante un discurso narrativo costumbrista de finales del Siglo XV. -Y por otro lado hechos inverosímiles- por cuanto el autor traslada a algunos de sus personajes principales a la época actual, seis siglos después.


El autor ha hecho una novela apta para todo tipo de lectores, pero de manera especial para aquellos que disfrutan de una lectura con un enfoque narrativo versátil, lleno de ocurrencias, incidentes, en suma peripecias del más variado calado, y que les provoque cuando menos, la expectación y la emoción.
En 1483, un joven y noble caballero, llamado Damiano Ciclidino, es exiliado por no dejarse ganar en una interminable partida de ajedrez con el v...anidoso marqués de Biarritz.
Damiano Ciclidino, se ve obligado a abandonar las esplendidas costas de Biarritz, en el suroeste de Francia, para emprender una aventura en solitario. Un inestable -venturoso- nomadismo que lo lleva a la Región de Aveyron, concretamente a Najac, en los lindes de los montes Aubrac, en el Valle de Lot, a unos 300 km de la frontera pirenaica con España, esplendida –por cierto- región ganadera, de apacibles paisajes, inspiradores de paz y armonía, pero no exentos de peligros, hechicerías, magia y, tal vez, pactos con el diablo.

 


El exiliado Damiano Ciclidino es el personaje central de la novela y, en el devenir de esta historia, va sobrellevando distintos fenómenos de índole paranormal que le obligan a actuar de maneras diametralmente antagónicas.

No se siente en ningún momento desamparado, el apuesto Ciclidino, pues en Aveyron logrará hospicio. Allí será admitido, siendo además muy bien considerado, hasta el punto que el amo y señor del lugar, le nombra batlle –lo que quiere decir- regidor del feudo, y como huésped especial, le ofrece el confortable palacete de Najac, lugar donde convergerán extraños y comprometidos sucesos, los cuales, conducirán a Damiano a desenvolverse con suma pulcritud junto a su admirada Stela, una de las tres sirvientas, por el aparente y azaroso parecido de sus ojos con los de la Duquesa Andrea Di Prada, nada menos que la esposa de su benefactor, el singular y carismático Grohan, poderoso duque de la Región de Rodez, un personaje déspota y cruel, pero enfermo de amor por su bella y hermética esposa, la inaccesible Andrea Di Prada.




 

sábado, 26 de marzo de 2016

Algo está pasando





Justo habíamos dejado un buen trecho del sendero Sulayr, el que va desde el Área Recreativa de Puente Palo a Capileira. Un recorrido hermoso, y en cierta parte estirado y llano donde el corazón se relaja de la brusca subida que nos llevó hasta la Balsa del Almiar transitando la acequia del mismo nombre y escoltados por un bosque de encinas y robles centenarios. Un paraje idílico con el Veleta y el Mulhacén contemplándonos desde sus alturas y nuestros ojos cegados por el sol hermoso de la primavera  que nos hacían flotar aún más percibiendo la montaña como una vidriera abierta a lo divino donde todos los colores de la rosa y del hombre son apremiados a escarbar el corazón y la sangre como un recién nacido que, libre de toda vanidad, calma su apetito en el pezón de la madre. 
Poco más adelante, traspasando una línea cortafuego, dejamos el Sulayr que se enderecha por el ramal de la izquierda hacia Capileira y por el ramal de la derecha nos encaminamos hacia el Paraje de la Atalaya desde donde se divisan, como surgiendo de una postal, los pueblos del Poqueira: Bubión, Pampaneira,… y si miramos al sur, toda la serranía que va desde la cumbre del Mulhacén al litoral mediterráneo, y a unos cientos de metros el Centro de Budismo Tibetano O Sel Ling. Un hervor de sangre, un revoloteo de emociones, un asomo de inquietud sacude el pecho, como si una flor se te pusiera delante en el instante mismo  de su nacimiento. Algo está pasando. 
Allí, en lo más alto del lugar, calmando la respiración y nuestros pasos, la encontramos plétora, exuberante en sus formas, ella es la Estrella, un ir y venir de sensaciones intangibles, subjetivas, inmateriales. Es Tara, es la madre, es la sabiduría plena, holística,  no sabe de almas ni de pecados, y puede satisfacer cualquier deseo. Es Tantra, es yoga, es la virtud sin más metáfora.
.

sábado, 19 de marzo de 2016

La memoria Fragmentada. Especial Día del Padre


 
                                   Notarás una ausencia, de repente,
                                              Creciendo a tu lado, como un árbol…
                                                                              Sylvia Plath
.
.
A sus ochenta años
le quedaban partidas por jugar,
no quería marcharse sin ganarlas,
(incluso con algunas artimañas)
pero su pecho no aguantó
una tercera operación
y el corazón se fue con él.
.
.
Al intentar ser árbol
comprendí la tristeza del sarmiento
y sentí sus espinas;
más de pronto rompí a llorar por mis escritos,
el viento en tanto sacudía mis ramas
y aventaba mis pétalos.
.
.
Apagado, persiste su cuerpo entre las formas,
del universo luz desnuda,
como un soplo del centro del a tierra.
.
.
Un oscuro universo desgastaba la tierra.
El hombre reclamó al infinito,
siendo cáscara en alta mar,
una última partida por jugar.
.
La memoria Fragmentada. Fragmento,
© Editorial Alaire 2008
.

Faenando, en primer plano, mi padre con gorrita blanca,
nada menos que en el Arrecife de las Sirenas,
Cabo de Gata, Almería, España.
 
 
 

miércoles, 2 de marzo de 2016

El amor del diablo, reseña al libro de Andrés Rubia Pedreño






Desde la patria inédita del insomnio no es posible madrugar. Simplemente uno se levanta de la cama y, con los pies entre el suelo y el sueño, sale a la calle, recorre el frescor de la -todavía- madrugada y espera -libro en mano- a que abran los bares -benditos sean- y sientes que la noche no ha pasado y tu sigues encendido como una antorcha que te sigue a cada paso. El amor del diablo lleva un día guiñándome los ojos de sus mas de 400 paginas, presiento que estoy al inicio ...de una excursión inédita inmersa de intrigas y aviesas intenciones donde solo Dios o el diablo podrían hacerte traspasar la barrera del tiempo para pactar con ellos y poder ver el mundo lleno de luz y libre de pecado. Enhorabuena Andrés Rubia Pedreño por esta nueva entrega literaria que con pacto o no con los mencionados arcanos, se augura buena acogida por parte de los lectores.